De espejismos y otros fantasmas
Pedro Oller poller@ollerabogados.com | Martes 16 noviembre, 2010

Que levante la mano el que como yo, ha tenido suficiente de la controversia con Nicaragua. Se me ocurre que somos varios y que esos apostamos por un ojalá.
Quienes contextuamos que tras el fallo de la OEA, lo probable es que se siga manipulando nuestra psiquis en defecto de una solución definitiva, pedimos un alto.
De decir, que entre quienes la tienen clara, el más probable sea el Comandante Ortega quien ha empleado la noche del sábado para insultar y berrear, más no para retirar a sus tropas invasoras.
¿Y qué pasó el domingo? Nos punzamos el hígado, nos encabronamos y dejamos que el negativismo se apoderara de nosotros, en virtud y solo por el conflicto con Nicaragua, otro día más.
El viernes hubo humo blanco. Costó un montón y mis felicitaciones para un Gobierno, pero en especial para una persona de la que me enorgullezco no solo como colega si no como costarricense que es nuestro embajador, Don Enrique Castillo. No se perdió el rumbo, no se cedió a la inoperancia, no hubo apuro ni tampoco componenda. Fuimos lo que somos, y se obtuvo el resultado que se puede en el foro escogido.
Ahora, ¿qué más se pretende?
Que se vayan. Perfecto salvo porque ¿cómo hacemos si no quieren? Queda ir a la ONU, a la CIJ y que el señor Chang con su motor plasma lleve la inconformidad (o se los lleve) al ciberespacio. Tres vías posibles, tres vías igual de improductivas.
Las redes sociales, tan de moda, están plagadas de manifiestos de indignación y análisis muy respetables sobre lo que acontece. Leo a personas que me parecen ilustres, manifestando su indignación y con ello, manteniendo viva la llama de la queja que nos han prendido, oficialmente al Norte y aquí.
Me preocupa frente a ello, primero la xenofobia que viene acompañada de la intransigencia, el desprecio, la violencia y el recurrir a las vías de hecho molotov que en suma, no somos nosotros, no nos representa y no nos merecemos.
Mientras tanto, el tiempo pasa inexorable y en Costa Rica, pareciera que se nos olvidó que hace solo unos días vivimos una emergencia nacional de proporciones apocalípticas. ¿Por qué no emplear todos estos esfuerzos, esta indignación y estas energías a dirigirnos en esa dirección que construye, lejos de la disputa con el vecino que siempre distrae?
Tenemos tantas necesidades, tanto por hacer y tanto sobre todo por edificar que no termina uno de entender, de creer que esto contribuya en algo para un norte que está claro y que no está ahí, al Norte de Isla Calero.
Sí, es cierto que no tenemos —muy para nuestra pena— un proyecto país al que podamos apuntar hoy o en cualquier momento. A falta de ese, basta recordar que sí tenemos un entorno que está por demás establecido y en el que vivimos juntos nos guste o no, con Nicaragua.
A ver si nos volvemos a enfocar en lo relevante, porque mucha de esta culpa la tiene la S, a cuya falta de protagonismo bastaría recordar que mañana juega Costa Rica y ¡hay que celebrar carajo!
NOTAS ANTERIORES

¿Sabrán cómo, los oferentes?
Miércoles 30 abril, 2025
Imaginar un Airbus 380 con 850 pasajeros costarricenses a bordo listo para viajar a Paris. Falta un piloto – el capitán --y hay varios oferentes incluso algunos

¿Qué tenemos para mañana Primero de Mayo?
Miércoles 30 abril, 2025
El segundo evento es la celebración del Primero de mayo como día internacional de los trabajadores. Se originó en las luchas que se dieron a partir de 1880 en E

Precios de transferencia: otros aspectos clave
Martes 29 abril, 2025
En nuestra entrega anterior explicamos que los precios de transferencia están regulados por ley y tienen un largo historial en Costa Rica.

La inseguridad atenta contra nuestra paz, contra nuestra felicidad, contra nuestro progreso
Lunes 28 abril, 2025
En esta columna Disyuntivas en La República publiqué la semana pasada mi comentario “Nuestra felicidad depende de la libertad y del apoyo social...