Banca de Desarrollo
Vilma Ibarra vilma.ibarra@gmail.com | Miércoles 26 marzo, 2014

Es la era del negocio y el lucro. Del egoísmo y la mezquindad. Hasta que se nos caiga el andamiaje democrático
Hablando Claro
Banca de Desarrollo
En las postrimerías de su gestión, la Asamblea Legislativa es teatro de batalla de los intereses empresariales y bancarios que rechazan contra viento y marea, la pretendida imposición de un tributo del 15% a los intereses de las transacciones financieras que se cobraría a los bancos no domiciliados en el país (bancos de maletín).
Para los bancos costarricenses la pretensión de aprobar este tributo resultó más que una buena noticia, ya que por años han tenido que coexistir con la competencia desleal que implica que esos mochileros foráneos, estén colocando sus recursos aquí sin pagar por ello.
¿Por qué entonces hay diputados parados en la escoba? Sencillo, porque con la imposición de ese gravamen se afectarían BCT y BICSA dos actores que son costarricenses, pero domiciliados en Panamá.
Al parecer, en la negociación inicial se había dispuesto imponer a estos dos casos solo un 5% del tributo. Sin embargo, luego el proyecto propuso un incremento paulatino hasta llevarlos también al 15%.
Entonces ambos actores (con sobrado poder económico, político y mediático) están haciendo valer su peso en el Congreso y —dadas las características de nuestro accionar legislativo— con solo cuatro o cinco diputados han logrado torpedear la iniciativa.
Así, los más de 40 legisladores que están a favor del proyecto de reformas al Sistema de Banca para el Desarrollo, no tienen suficiente poder para lograr su aprobación.
Las postergadas modificaciones están pues amarradas a otros intereses que no son los intereses, ni las imperiosas e incuestionables necesidades de promover y desarrollar micro y pequeños emprendimientos empresariales.
Que no son otra cosa que proyectos de vida de ciudadanos y ciudadanas que lo único que requieren es una oportunidad para sacar adelante sus iniciativas. Sus vidas.
Tales obstáculos en el camino dejan un enorme sinsabor porque ponen en evidencia cómo los intereses corporativos son capaces de hincar la aspiración de luchar con leyes y políticas públicas contra la creciente desigualdad y la falta de oportunidades, sobre todo en una época en la que es tan escuálida la generación de empleo formal de buena calidad.
Algunos plantean que el proyecto del SBD tal y como está redactado resultaría una herramienta débil para permitir efectivamente el acceso al crédito a quienes hoy no tienen esa posibilidad, porque al no tener supervisión diferenciada, no podría caminar como lo han hecho iniciativas de financiamiento tan exitosas como el Banco del Sol de Bolivia o el Nafin de México y entonces es poco lo que resolverá en la práctica.
Podría ser. Pero ese es un debate que está siendo soslayado por la cruda realidad de los intereses del enriquecimiento de unos pocos jugadores y sus operadores políticos a quienes lo único que importa es el resultado de su gestión.
Es decir, que se elimine el impuesto a la banca de maletín y punto. Lo demás no tiene relevancia. Es la era del negocio y el lucro. Del egoísmo y la mezquindad. Hasta que se nos caiga el andamiaje democrático.
Vilma Ibarra
NOTAS ANTERIORES

Sobre el artículo 29
Miércoles 16 abril, 2025
Y este caso del presidente provoca otra pregunta que es sobre la acción política de trabajadores del gobierno. Una cosa es hacer proselitismo o de presionar a f

Los avances sociales y nuestra institucionalidad son parte de nuestra mayor riqueza. No los perdamos
Lunes 14 abril, 2025
Recientemente se publicó el Índice de Progreso Social, que nos debe hacer reflexionar sobre algunas de nuestras grandes ventajas que no debemos perder.

Diferentes en un mundo de iguales
Viernes 11 abril, 2025
Algunos se están callando y prefieren que no los noten. Tienen miedo o se cansaron de que los juzguen.

Riesgos de guerra entre Estados Unidos e Israel versus Irán
Jueves 10 abril, 2025
En medio de la guerra arancelaria que se vive a nivel planetario hay tambores de otra guerra más política que podría estallar durante las próximas semanas.