Por un Gobierno sensato
Mónica Araya maraya@cadexco.net | Martes 12 mayo, 2015

Por un Gobierno sensato
…”Sensatez es la cualidad de sensato (cuerdo, prudente o de buen juicio). La sensatez, por lo tanto, está asociada a la cordura, el entendimiento, el raciocinio y la prudencia…” Por ejemplo: “El gobierno dejó de lado la sensatez y respondió a los ataques con agresividad”, “No le conviene exponerse de esta forma, tiene que demostrar sensatez en sus acciones”, “Necesitamos dirigentes que se manejen con sensatez y que no despilfarren los recursos de la nación”.
Se considera que la sensatez es uno de los mejores valores que puede tener una persona u organización tanto para su propio desarrollo como para la relación con los demás y su papel en la sociedad.
A poco más 365 días de gobierno, es obvio que se requiere de mayor sensatez; pero especialmente será imperativo no volver a cometer los mismos errores una y otra vez.
Tendrán que preguntarse: ¿Por qué estoy haciendo esto? ¿Es sostenible?
No importa lo bueno que algo se ve en el exterior, es solo mediante la adopción de una diligente y honesta mirada más profunda que vamos a descubrir lo que realmente necesitamos saber: la realidad que nos debemos a nosotros mismos.
Este Gobierno no puede dejar de preguntarse: ¿por qué están donde se encuentran? y ¿qué parte están jugando en esta situación?
Ningún líder puede olvidar que su vida interior determina su éxito externo. Cuáles han sido las distracciones superfluas de nuestro presidente y su gabinete. Todo lo que sea una distracción para gobernar debe de ser enviado para la casa o engavetado y ojalá con una llave a la que no tenga acceso durante estos tres años que quedan. Si quiere sacarlo cuando termine el Gobierno, estará en su derecho. Pero no ahora.
Lo que es importante en el liderazgo es el perfeccionamiento de sus habilidades. Todos los grandes líderes siguen trabajando en ellos mismos hasta que entren en vigor. He aquí como:
• Aprender a ser fuerte pero no desagradable. Algunas personas confunden la grosería por la fuerza. Ni siquiera es un buen sustituto.
• Aprender a ser amable, pero no débil. No debemos confundir la bondad con la debilidad. Debemos tener la amabilidad de decir la verdad. Debe ser lo suficientemente amable para decir las cosas como son y no disfrazar.
• Aprender a ser audaz. Se necesita valentía para ganar el día. Para construir su influencia, descubrir la primera señal de los problemas.
• Estar orgulloso pero no arrogante. Se enorgullece de ganar el día. El peor tipo de arrogancia es la arrogancia de la ignorancia. Es cuando usted no sabe que no sabe. Ahora ese tipo de arrogancia es intolerable. Si alguien es inteligente y arrogante, podemos tolerar eso.
Ahora, recordemos que el Gobierno debe estar compuesto por el Presidente, su gabinete y un grupo de asesores esenciales para el buen funcionamiento del sistema ejecutivo, el cual esta íntimamente ligado a otras instituciones y fuerzas políticas. No tener conciencia de esta realidad dificultará la selección del equipo adecuado y del replanteamiento de los objetivos para los próximos tres años.
Mónica Araya
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